Todavía no es una asignatura obligatoria en los cursos de las etapas educativas de todo el país, pero sí en algunas de las Comunidades Autónomas como Madrid. Lo que sí podemos asegurar es que la robótica, como formación extraescolar, cada día está más presente en la educación de nuestros hijos. He aquí algunas de los beneficios por los que los educadores cada vez confían más en la robótica.
1 – Los alumnos se involucran activamente en su propio proceso de aprendizaje.
2 – Se desarrolla la lógica intuitiva y la intuición de ingeniería.
3 – Potencia sus habilidades de resolución de problemas y de investigación
4 – Se fomenta su creatividad, desarrollando varias competencias claves del currículo educativo.
5 – Se aprecia que el trabajo disciplinar conseguido durante las clases, mediante el juego, se vuelva un hábito.
6 – Se convierten en autodidactas activos.
7 – Se consigue un buen clima de trabajo donde prima el buen comportamiento, la concentración, el respeto con los compañeros y adquieren el sentido de la responsabilidad con el material.
8 – Comprensión y dominio de los conceptos básicos del scratch (lenguaje de programación).
9 – Aprenden a trabajar en pequeños grupos, evitar la frustración y fomentar la motivación.
10 – Percepción del trabajo como un reto en el que alcanzar su meta es un juego, no un esfuerzo aburrido
Nadie hasta el momento ha puesto en duda el que la robótica educativa tenga grandes beneficios en el alumnado. No sólo adquieren valores propios como el respeto, el trabajo en equipo, la tolerancia, la paciencia, etc. sino que también les ayuda a utilizar la lógica individual, el intelecto en la programación, el ingenio y la originalidad en la formación y construcción de robots.
Por estos motivos, cada vez más docentes tratan de aplicar esta metodología en sus clases ordinarias.